A principios del verano pasado, me llamó mucho la atención ver en una gran y muy conocida superficie comercial dedicada al hogar y a la jardinería, que vendían «guadañas«. No las había visto nunca a la venta y la verdad es que dan miedo. Recuerdo que comenté con los dependientes que uso se le estaba dando hoy en día, a tan peligroso artilugio:
–«Cortar el césped», me dijeron.
–Increíble, pensé. Quien se va a «destrozar» la espalda existiendo máquinas eléctricas que no cuestan más de 30 € y que además de realizar un corte más fino, regular y menos traumático, no son tan peligrosos…
Pues bien, las lesiones no se hicieron esperar y durante el verano tratamos varias heridas complejas y sucias en el servicio.
Alguna de estas lesiones se presentaba con una herida grave, como es el caso del paciente que les describo a continuación, quien se seccionó un importante nervio que pasa por la rodilla y cuya función es la de levantar el pie y los dedos, el nervio Ciático Popliteo Externo.
Las lesiones de los nervios son muy graves, puesto que el cuerpo humano tiene una capacidad muy limitada de regenerar las estructuras neurológicas, por lo tanto, son lesiones que presentan una alto índice de secuelas definitivas y que en ocasiones necesitan nuevas cirugías de rescate con la única intención de limitar el déficit motor ocasionado.
En esta foto se puede apreciar como la herida no parece muy llamativa:
pero ha sido lo suficientemente profunda como para seccionar por completo el nervio Ciático (CPE).
La operación consistió fundamentalmente en suturar con un hilo muy fino «de 10 ceros» los tres diferentes fascículos que componen este nervio.
Les dejo un video donde puede ver un resumen de la técnica quirúrgica así como la evolución a los 6 meses. La recuperación en este tipo de lesiones normalmente es muy lenta y no se suele apreciar gran mejoría hasta que pasa algo más de un año.
Dr. Enrique Galindo Martens